Mujeres

No sé ni por donde empezar a escribir esto.
La verdad es que es algo que no he sacado de mis pensamientos y sentimientos con tanta naturalidad. El pasado muchas veces avergüenza, el pasado deja huellas... imborrables, solo las olvidas por momentos. No quiero parecer dramática, ni ser una víctima, pero creo que las mujeres muchas veces somos las que cavamos nuestra propia tumba, claro, el machismo nos echa una mano...
...Durante algún tiempo yo solía caminar por la calle con una sonrisa en el rostro, sin problemas. Conocía mucha gente, me sentía libre en muchos sentidos. No quiero decir que era feliz porque el paradigma de la felicidad es a veces bastante idiota. Pero era Yo.
...Muchas mujeres dejan o más bien, DEJAMOS de ser nosotras mismas. Al menos a mí, eso fue lo que más me dolió. Dejar de pensar; tratar de no sentir, tratar de no mirar. Y sobre todo, que jamás puse resistencia a ese cambio y que, en ocasiones, yo misma propiciaba todo.
...Cuando ves las cosas "desde afuera" son muy diferentes a cuando las estuviste viviendo. Te llega una especie de reflexión y comienzas a nombrar las cosas por su nombre: Violencia. Hay como ochenta mil tipos de violencia, pero cualquier que hayas vivido (y no digo sufrido porque, repito, lo que menos quiero es hacernos parecer como víctimas) eso es lo de menos; piensas que las cosas no van a cambiar, te sientes atrapada. Yo muchas veces sentí como si conviviera con el Gran Hermano de Orwell y, créanme, eso es horrible.
...Y cuando sabes que hay mujeres a las que les pasó lo mismo, quizá te hace sentir mejor... Pero cuando escuchas que hay aquellas que en este preciso momento están viviendo una situación parecida, a mí me crea un conflicto esta situación:
Pienso que las mujeres aún no formamos lazos suficientemente fuertes para ser solidarias con nosotras mismas en estas situaciones. Ni siquiera contamos lo que nos sucede, nos callamos hasta con las amigas, hasta con nuestra propia madre o con nuestras hermanas. Nuestro concepto de Amor queda totalmente tergiversado, se hace tormentoso y llegamos a creer que el Amor "es así", que tiene que doler, que tiene que ser privado el sujeto al que amamos, creemos que hay propiedades; pensamos que el Amor es compartir cada milésima parte de nuestra vida con el otro (a pesar de que no queramos hacerlo), que el Amor no tiene que escapar de la pareja, que debemos vivir en una gran burbuja de dos... Introducimos al Amor las palabras "traición", "deslealtad" y, peor aún, "infidelidad". El supuesto "Amor" lo llega a ser todo... menos Amor.
...La dependencia llega a ser muy cabrona, pero es cierto eso que dicen que "el tiempo es la mejor medicina", todo pasa y pasa y te vas dando cuenta que las cosas no son tan malas, que no pueden ser peores a como eran antes. Entonces llega el momento de recuperarte de volver a ser TÚ, estés con alguien o no. Las mejores experiencias se aprenden a punta de trancazos, lamentablemente. Pero así es.
La reconstrucción después de un terremoto nunca es sencilla. Duele. Duele saber que todo sucedió porque lo permitiste, duele darse cuenta que todo este tiempo tuviste en tus manos el poder de detenerlo pero no lo hiciste.
Como dije, solo quisiera que las mujeres fuéramos un poco más solidarias, un poco más humanas, un poco más Nosotras, UN POCO MÁS MUJERES. Nos necesitamos.